A partir de enero, ambos dispositivos podrán equiparse con un sensor de H₂. Esto significa que puede controlar el contenido de hidrógeno en la biomasa en las primeras fases del proceso. ¿Y por qué es importante? Es sencillo: esta detección temprana le permite reaccionar inmediatamente y optimizar la producción de metano.
Más eficiencia, menos fallos y, lo mejor de todo, no sólo ahorrará costes, sino que también contribuirá a una producción de energía más sostenible. Prepare su planta de biogás para el futuro.
